El pimiento rojo se puede consumir de diferentes maneras, aporta un toque de color a los platillos y, además, es una fuente de propiedades y nutrientes para el organismo. Es uno de los ingredientes predilectos de la Dieta Mediterránea y un producto que no puede faltar en tu hogar.
- Contiene vitaminas como B6, B9 y C, así como antioxidantes. Combate el envejecimiento prematuro y también es rico en fibra, agua, proteína, flavonoides, carotenoides y luteína.
- Mejora la capacidad de la memoria y frena el desarrollo de enfermedades degenerativas y cardiovasculares.
- Ayuda a prevenir el riesgo de sufrir anemia, pues fomenta la absorción del hierro de los alimentos que consumimos.
- Para quienes cuidan su figura y llevan un balance en su peso, es ideal porque es bajo en calorías y aumenta la sensación de saciedad.
- Reduce el insomnio y la ansiedad, así como los efectos del llamado Síndrome Premenstrual (PMS).
- Para que te hagas una idea, 100 gramos de pimiento rojo fresco aportan 190 miligramos de vitamina C, esto equivale ¡a más del triple que las naranjas!
- Su contenido de fibra es un aliado para prevenir enfermedades como cáncer de colon y para el control del azúcar en la sangre y el colesterol.
- Otro de sus usos es como ingrediente para remedios que alivian pieles irritadas por herpes o psoriasis.
- Son ricos también en potasio y tienen muy baja proporción de sodio, por lo que son diuréticos, facilitando la eliminación de líquidos de nuestro organismo.
- Cuando el pimiento tiene tres protuberancias en la parte inferior, su sabor es más dulce, por lo que se puede consumir crudo o en una sabrosa ensalada, cuando tiene cuatro protuberancias quiere decir que su sabor sabor será un poco más amargo, por lo que es mejor consumirlo cocido.