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Winston Churchill decía que “las actitudes son más importantes que las aptitudes”… y una buena actitud cambia toda las perspectiva que tenemos de las cosas. Siempre habrá momentos y etapas difíciles y obstáculos que cuesta superar, pero si la vida se afronta con actitudes positivas, esto resulta más fácil de lograr.

Además, una buena actitud también es beneficioso para la salud, pues Judith T. Moskowitz, de la Universidad Northwestern Feinberg School of Medicine en Chicago, indica que mejora el sistema inmune y aumenta la calidad de vida.

Te compartimos consejos para mejorar la actitud.

  1. Inicia el día con gratitud y cada semana haz una lista de lo que te hace feliz y te satisface a nivel personal y profesional
  2. Diariamente reconoce algo positivo que te haya pasado y/o que hayas hecho
  3. Identifica y analiza cómo aplicas todas tus virtudes y fortalezas
  4. Aliméntate sanamente, duerme lo suficiente y practica ejercicio regularmente
  5. Respira profundo y cuando sientas que la ansiedad y el estrés se apoderen de ti, inhala y exhala lentamente
  6. Establece rutinas y prácticas que conlleven a buenos hábitos
  7. No trates de controlar lo que no se puede y está fuera de ti, mejor busca formas de resolver las cosas de la mejor manera posible
  8. Procura y trabaja en tus relaciones interpersonales, dedícale tiempo a quienes más quieres
  9. Desconéctate de dispositivos móviles por lo menos 90 minutos antes de ir a dormir
  10. Combina tus rutinas semanales con actividades recreativas y de ocio, en balance con el trabajo y otras responsabilidades será de gran beneficio para tu bienestar

 

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