La comunicación, sobre todo la no verbal, es pieza clave para expresar quién eres, qué haces y lo que te distingue. Te presentamos consejos para hacerlo de modo eficiente, apropiado y congruente.
¿Te has puesto a pensar qué proyectas cuando comunicas algo? Y si las personas a las que hablas, ¿perciben el mensaje correcto? La comunicación con palabras o no verbal; presencial o virtual, es un instrumento indispensable para fundamentar y transmitir de modo adecuado tu marca personal.
Según el psicólogo e investigador, Albert Mehrabian, profesor emérito de psicología en la Universidad de California, la comunicación está contenida en su “Regla 55-38-7”, clasificándola en:
Comunicación Visual, es decir lo que se ve, como el aspecto, los gestos o movimientos del emisor. Vocal, lo que se oye, como las palabras y su volumen, ritmo, resonancia, entonación. Comunicación Verbal, refiriéndose al contenido y al potencial de las palabras que se expresan, las cuales solo conforman el 7 por ciento de la comunicación.
Esto significa –según Mehrabian– que el 93 por ciento de nuestra comunicación es no verbal. (cfr. Mehrabian, Albert. “Silent Messages”, Wadsworth Publishing Company, 1971). Esta regla representa un elemento importante que apoya el modo como nos comunicamos, para contribuir eficientemente y aportar valor a los receptores que son nuestro público objetivo.
Entonces, ¿de esto se deduce que importa poco lo que se dice, ya que lo realmente significativo es cómo se diga? No necesariamente, ya que entran en juego la información transmitida y el contexto, tanto como las emociones y actitudes del emisor y quizá también del receptor.
La comunicación es pieza importante para expresar quién eres, qué haces, qué piensas, crees o deseas, qué aportas a los demás, qué problemas tienes o qué soluciones puedes brindar, a qué te dedicas, qué te hace diferente y mucho más. Una buena comunicación hace que tu marca personal salga a la luz, brille y tenga altas posibilidades de ser conocida, ya sea en el ámbito profesional, social o incluso en tu propia familia. Esto hace que tu mensaje, llegue acertadamente bien, se entienda, que ganes credibilidad, confianza y autoridad y que tu reputación se vea favorecida, logrando tus objetivos.
Algunas de las personas que llegan a solicitar nuestros servicios de marca personal y asesoría de imagen, siendo referentes y grandes profesionales en su campo, se dan cuenta que han descuidado su modo de expresarse, generando cierto grado de decepción y desconfianza tanto de ellos como de sus productos o servicios. ¿Por qué? Por una causa de fondo y forma. Muchas veces, sin darse cuenta pueden prestar poca atención al modo de transmitir la riqueza de su contenido. Así que te invito a honrar tu marca personal mediante una buena comunicación en todas sus dimensiones.
Consejos para comunicar
Seguramente muchas de estas recomendaciones ya las conoces, pero lo importante no es saberlos sino realizarlos e incorporarlos a tu vida para fortalecer tu marca personal. Una marca personal que se resume en lo bien expresado por Peter Drucker, el padre del Management: “Lo más importante de la comunicación es escuchar lo que no se dice”.
Enfoquemos algunas ideas para aplicarlas en la comunicación virtual que se ha vuelto la gran protagonista de nuestra realidad. Para fortalecer nuestra marca personal de modo eficiente, apropiado y congruente, no hace falta tener grandes talentos, solo necesitamos aprender algunos patrones básicos para lograrlo. Aquí tienes unos pocos:
- Prepara lo que vas a transmitir ya sea por escrito o hablado, centrándote en lo primordial
- Si se trata de un video o transmisión en vivo asegúrate de haber ensayado lo suficiente. Lee los textos antes de enviarlos
- Aporta siempre contenido de valor
- La buena ortografía no ha pasado de moda, ¡cuídala! El mundo digital no excluye una buena puntuación o redacción
- Exprésate con claridad utilizando un lenguaje sencillo. Evita las ambigüedades
- Arréglate como si fuera un encuentro presencial. Usa los colores adecuados
- Cuida el ambiente visual
- Actúa, habla y observa siempre con amabilidad
- Comunica de modo creíble y confiable
- Demuestra autoridad en lo que dices o escribes